Susana y Joaquín llevan juntos desde que eran muy jóvenes. Como todas las parejas, han tenido sus baches, sus enfados, sus desencuentros… Pero, por encima de todas las dificultades, ha prevalecido el cariño y el respeto. Y, especialmente, la paciencia de Susana, quien ha permanecido firme e incondicional a pesar de tanta distancia y tanta ausencia.
A punto de cumplir los 19 años de casados, ha llegado el momento -y el lugar: Las Vegas- de demostrarle a su mujer su agradecimiento, y la voluntad de que sigan siendo marido y mujer hasta que la muerte los separe, y esta vez, en contraposición a la primera, celebrar una ceremonia en la más estricta intimidad, tan solo con sus hijas como testigos.